El proyecto actual: la búsqueda de los miembros de la cohorte.

El entusiasmo de Flavia Mendoza, su conocimiento de los miembros de la cohorte que todavía viven en Tlaltizapán, y su liderazgo en la comunidad hizo que, en relativamente poco tiempo, conociéramos cuál había sido el destino de la mayoría de los miembros de la cohorte. De un total de 336 niños nacidos entre el 1º de febrero de 1965 y el 28 de febrero de 1966, fue posible localizar 118 que residían en la comunidad. De los restantes miembros de la cohorte la investigación confirmó la muerte de 49 de ellos, la mayoría en los primeros 5 años de vida, 10 residentes en otros estado de la República y 40 que habían emigrado a los Estados Unidos.

Un equipo integrado por Flavia Mendoza, una psicóloga que había formado parte del equipo de investigación original (María Luisa Oliveros), y dos enfermeras (Cinthya Cadena y Angélica Galicia)visitó en su domicilio a las personas identificadas para sensibilizarlas en relación con el estudio y para obtener su consentimiento para ser trasladadas a la ciudad de México y ser evaluadas clínica y funcionalmente. Con la finalidad de lograr el mayor número de aceptantes, se organizó una reunión en el CRE a la cual se les invitó. Dicha reunión, que contó con la asistencia de las autoridades del INP y del INGER, incluyó una presentación amplio del estudio y de sus objetivos, con énfasis en los beneficios derivados de su participación, principalmente una evaluación integral de su estado de salud, sin costo, así como recomendaciones y sugerencias sobre cómo enfrentar los problemas de salud que hubieran sido detectados.

El evento fue exitoso, ya que asistieron la mayoría de los miembros de la cohorte localizados, varios de ellos acompañados por sus familiares. El ambiente fue festivo ya que la mayoría de ellos guarda recuerdos muy positivos de la época en que fueron evaluados para monitorear su crecimiento físico y su desarrollo mental. Inclusive, varios recordaron haber sido llevados a las instalaciones del INP para se tratados en el hospital de problemas infecciosos y nutricionales que enfrentaron en su infancia. La fotografía que se incluye muestra el aspecto de la reunión. Al término de la misma se les ofreció un buffet, lo que contribuyó al éxito del evento.

De los 118 miembros de la cohorte localizados, 82 aceptaron ser trasladados a la ciudad de México para su evaluación, 32 hombres y 50 mujeres. El principal argumento para no participar fue la inseguridad y el temor a desplazarse a la ciudad de México.